tonino y marina




Había una vez un circo que llegó a la Ciudad de la Luz un día de primavera.
Tonino el payaso borracho contaba con la simpatía del público,no se sabe si por gracioso o porque daba un poco de pena,era un gran aventurero y un donjuan al que le encantaba conocer todos los rincones de las ciudades que visitaba el circo y,como no, enredar a sus bellas mujeres con su fanfarronería y sus ingeniosas frases de folletín.
Marina había llegado buscando una vida mejor,un trabajo,no llevaba mucho tiempo en la ciudad y no conocía a mucha gente,sólo a algunos emigrantes como ella con los que se reunía algún fin de semana e iban a bailar. Era lo más parecido a una familia que había encontrado allí. Era una mujer muy guapa pero extremadamente tímida y muy devota,con mucho temor de Dios; En su pueblo había convivido con su padrino,cura, y con unas tías que le inculcaron ese fervor religioso. Incluso pensó en hacerse monja,justo después de que su novio de toda la vida le mandase una carta para decirle que se casaba con otra; En lugar de eso,dejó el pueblo y se fue al extranjero.
El día en que Tonino entró en el baile de la Maison des Rêves,lo primero que vio,al final de una mesa inmensa llena de canapés y pasteles,fue una hermosa y resplandeciente botella de whisky de importación que se dispuso a inaugurar para animarse un poco y ¡vaya si se animó!,comenzó a charlar con todo el mundo y a hacer gala de su faceta más cómica y acrobática. Vio a Marina en una esquina,sentada en una silla observándolo todo con ojos como platos. Inmediatamente Tonino sintió un chispazo en medio del pecho y caminó hacia ella con un único objetivo:arrancarle una sonrisa.
No paraba de soltar burradas,Marina,no sé si porque lo encontró gracioso o le dio un poco de pena,le sonrió.Bailaron toda la noche y ella le prometió ir a verle actuar al circo al día siguiente.
Tonino era un experto en hacer el ridículo dentro y fuera del circo. Esa tarde estaba más contento y excitado que nunca,Marina había ido a verle y al final de su número, cuando sacó la pistola para disparar a su compañero Otto,del cañón salió un cartel que decía: Cásate conmigo Marina,mujer divina.
Nadie pareció entender la broma final,bueno nadie salvo Marina,que estaba roja como un tomate,se levantó y salió corriendo.Tonino la persiguió vestido de payaso por la gran avenida hasta alcanzarla en el puente de la Libertad donde la detuvo.
Varios meses después,una noche de diciembre,casi en Navidad,cuentan que la cigüeña a causa de la nieve,no pudo viajar y por eso allí,en esa gran ciudad donde ella vive, una niña con ojos como platos vio la luz por primera vez y sonrió.
Dos años más tarde el circo recuperaba a Tonino,que desapareció del mapa.Marina hizo entonces una promesa a Dios,si le permitía sacar adelante su vida y la de sus dos hijitas,a cambio le entregaría su Amor.
Esta historia sucedió hace mucho,mucho tiempo,quien aquí la escribió la conoce porque tiene alma de payaso y a Dios en su corazón.
(a mis padres)

5 comentarios:

Andrés dijo...

Casate conmigo marina, mujer divina...
es un poco trilladete, no??
el del cartel era un aburrido.

me encantó el texto...

Anuk dijo...

...el del cartel se cansó de hacer siempre el mismo numerito. Se aburrió pronto en esta historia y se fue a perderse en otro cuento

Anónimo dijo...

A cada alma le pertenece un mundo distinto: para cada alma, cualquier otra es un trasmundo.
Hermoso relato.
un abrazo.

Anuk dijo...

Este cuentito está escrito con mi propia sangre.
Un abrazo

gotomax dijo...

annabellee...pues encuentro el relato de lo más bello. Es una bonita historia de amor, de esas que deseas sean reales (intuyo que lo es por tus comentarios).
tenemos el amor como algo ridículo, poco apto en estos tiempos de egoismos y de yosoloynadiemas. Demasiada gente mirándose el ombligo y sin saber lo que se pierde por no mirar al frente y ver la vida con colores. Muchas vidas tristes que nunca conocerán el amor de un payaso por su princesa.

Si has tenido el tiempo de leer alguna de mis entradas sabrás que en el fondo soy un PAYASO. Sí, con mayúsculas, así se escriben las cosas importantes y patra mí ser un poco payaso cada día me mantiene vivo.
De verdad, ojalá haya más gente dispuesta a quitarse la máscara y disfrutar de la vida.
Gracias por el enlace, un beso y una margarita de esas que tiran agua, mec mec!!!