Llanto

Cuesta levantar la mirada cuando las lágrimas pesan.
Anclados al fondo de un mar de recuerdos,
los ojos no quieren ser despertados.
Acurrucados al calor de los párpados se vuelven perezosos.
Por un hueco se cuela la amenaza de una nube gris.
Palabras condensadas a punto de estallar en un frío de fronteras.
Amor precipitado cayendo en forma de granizo.
Atmósfera improvisada como banda sonora.
Melodía para un cambio climático.
Y aunque deseo mantenerme firme, a cubierto del dolor,
no quiero abrir el paraguas de la indiferencia.
Voy a salir a llenarme la boca de lluvia con brazos abiertos.
Mojada hasta los huesos, beberé el agua que borre mi memoria.
Borracha de vida, aprenderé a ver bajo el agua.

1 comentario:

lourixe dijo...

A chuvia nutre, revitaliza. As primeiras pingas de primaveira, as primeiras do outono son as que fan reverdecer a natureza, preparándoa para unha nova explosión de cores.
Xa estou vendo como che nacen novos gromos...